02 JUNIO 2010
FORTÍN, VER.
OTORGAN SILLA DE RUEDAS A PERSONA DE LA TERCERA EDAD.
FORTÍN, VER.
OTORGAN SILLA DE RUEDAS A PERSONA DE LA TERCERA EDAD.
DIF Municipal de Fortín.
FORTÍN, VER.- A sus 68 años de edad, Doña Cecilia, ya no tendrá más problemas para trasladarse de un lugar a otro, ahora cuenta con una silla de ruedas que le facilitará sus labores en el hogar.
Oriunda de la comunidad de Monte Salas, “mami chira”, como así le llama su nuera Rufina Hernández, alimentó la esperanza de mejorar su calidad de vida, tras recibir una silla de ruedas por parte del DIF fortinense, al acudir personal de ese organismo, al llamado de la paciente de manera inmediata.
Y es que, en el pasado mes de abril, la vida de doña Cecilia Cortes Rojas, sufrió un giro inesperado que parecía empañaría sus ganas de seguir adelante. La enfermedad que le aqueja: insuficiencia arterial motivó a la amputación de su pierna izquierda debido a que padece insuficiencia arterial, lo que provocó que la sangre no circulara y no llegara a esta parte del cuerpo.
Sin embargo, ahora su historia es otra, y aunque la tristeza no desaparece del todo, sus deseos de vivir han sido fortalecidos al tener ahora un medio con el cual podrá desplazarse en su hogar y retomar de algún modo sus quehaceres.
Fue así como recostada en su cama, Cecilia recibió la grata y sorpresiva visita de quienes pensó jamás llegarían. No obstante, fue la misma presidenta del DIF municipal fortinense, quien le entregó una silla de ruedas, considerada tal vez, como el mejor regalo recibido por parte de sus autoridades.
En respuesta, doña Cecilia mostró una sonrisa de júbilo y una mirada llena de ilusión y gratitud para la primera dama de Fortín.
“Lo que hagan, no se los pagaremos nosotros, Dios los recompensará”, manifestó la beneficiada al momento de ser trasladada a su silla de ruedas.
Mientras tanto su nuera Rufina Hernández, narró la difícil pero no imposible situación que enfrenta doña Cecilia, ya que, antes de la operación era una mujer activa, y ahora con el apoyo funcional, es así como desea estar.
“Gracias a este beneficio, mi suegra podrá salir sin que sufra algún accidente”, expresó.
Es así, como Cecilia se convirtió en un verdadero ejemplo de perseverancia, que le permitió recibir la mejor de las sorpresas y con ello, la posibilidad de valerse por sí misma y demostrarse de lo que una mujer en sus circunstancias es capaz, cuando es respaldada por sus autoridades locales.
FORTÍN, VER.- A sus 68 años de edad, Doña Cecilia, ya no tendrá más problemas para trasladarse de un lugar a otro, ahora cuenta con una silla de ruedas que le facilitará sus labores en el hogar.
Oriunda de la comunidad de Monte Salas, “mami chira”, como así le llama su nuera Rufina Hernández, alimentó la esperanza de mejorar su calidad de vida, tras recibir una silla de ruedas por parte del DIF fortinense, al acudir personal de ese organismo, al llamado de la paciente de manera inmediata.
Y es que, en el pasado mes de abril, la vida de doña Cecilia Cortes Rojas, sufrió un giro inesperado que parecía empañaría sus ganas de seguir adelante. La enfermedad que le aqueja: insuficiencia arterial motivó a la amputación de su pierna izquierda debido a que padece insuficiencia arterial, lo que provocó que la sangre no circulara y no llegara a esta parte del cuerpo.
Sin embargo, ahora su historia es otra, y aunque la tristeza no desaparece del todo, sus deseos de vivir han sido fortalecidos al tener ahora un medio con el cual podrá desplazarse en su hogar y retomar de algún modo sus quehaceres.
Fue así como recostada en su cama, Cecilia recibió la grata y sorpresiva visita de quienes pensó jamás llegarían. No obstante, fue la misma presidenta del DIF municipal fortinense, quien le entregó una silla de ruedas, considerada tal vez, como el mejor regalo recibido por parte de sus autoridades.
En respuesta, doña Cecilia mostró una sonrisa de júbilo y una mirada llena de ilusión y gratitud para la primera dama de Fortín.
“Lo que hagan, no se los pagaremos nosotros, Dios los recompensará”, manifestó la beneficiada al momento de ser trasladada a su silla de ruedas.
Mientras tanto su nuera Rufina Hernández, narró la difícil pero no imposible situación que enfrenta doña Cecilia, ya que, antes de la operación era una mujer activa, y ahora con el apoyo funcional, es así como desea estar.
“Gracias a este beneficio, mi suegra podrá salir sin que sufra algún accidente”, expresó.
Es así, como Cecilia se convirtió en un verdadero ejemplo de perseverancia, que le permitió recibir la mejor de las sorpresas y con ello, la posibilidad de valerse por sí misma y demostrarse de lo que una mujer en sus circunstancias es capaz, cuando es respaldada por sus autoridades locales.
