ANIMALIA:
ES TIEMPO DE APROBAR LA LEY A FAVOR DE LOS ANIMALES
POR: MARICARMEN GARCÍA ELÍAS
Mientras hacía ejercicio cerca de un parque vi a los lejos, entre los arbustos, algo que parecía arrastrarse, cuando me acerco a revisar me doy cuenta que se trataba de un perro de tamaño mediano parecido a un pitbull, por su aspecto parecía tener varios días ahí, presentaba heridas con sangre seca, un ojo hinchadísimo y no podía levantarse y lo primero que pensé fue que estaba atropellado y como pudo se resguardó en el parque , se dejó cargar y lo llevé al veterinario, ya en la clínica me dice el veterinario que tiene las costillas rotas y múltiples mordidas , me dijo que las heridas son producto del ataque de otro animal y la fractura de costillas de una golpiza o una caída fuerte.
Me impresionó el diagnostico aún cuando he visto muchos casos donde ha imperado la crueldad hacia los animales, por ejemplo, una burra flaca que además de cargar a un lugareño de Tierra Blanca, llevaba cerca de 50 láminas de peso, por si fuera poco el tipo la iba picando para que caminara más rápido con un vara que en la punta tenía un cuchillo amarrado que hacía sangrar al pobre animal en su trasero a cada paso que daba, o que decir del primer animal callejero que adopté en Orizaba hace diez años que había sido víctima de zoofilia, o aquel perro sarnoso y cojo que encontré en Xalapa al que se le caía la piel a pedazos, etc. En todos los casos no se pudo castigar al culpable, sólo ayudar al animal que está siendo maltratado.
Luego de unos días el perro del parque iba mejorando, así que ilusamente pensé que si regresaba al lugar donde lo encontré tal vez sus dueños ya habían pegado carteles de su búsqueda como ha sucedido en otras ocasiones. Pues no, resulta que no había rastro de sus dueños hasta que preguntando una vecina me dice que uno de sus vecinos fue a dejar el perro ahí para que alguien se lo llevara, el pitbull había perdido una pelea y no conforme con las mordidas que el otro animal le causó, su dueño enfurecido lo pateó en la cara y en las costillas hasta casi matarlo pero en el último instante se arrepintió y lo fue a tirar al parque, la vecina me dice dónde vive este señor y me advierte que es agresivo también con sus hijos a quienes golpea a diario y que a pesar de que tiene un trabajo honesto se dedica a las peleas por diversión. Pienso en lo doloroso que le está resultando al perro su rehabilitación y no puedo no hacer nada al respecto, así que fui a ver a este sujeto , le expuse de manera educada mis ideas y traté de que entendiera que los animales y sus hijos tienen derechos, no puede golpearlos cuando se le antoje y entonces para mi sombro el fulano me contesta que efectivamente los niños tienen derechos pero como no hay prueba de que los golpea nadie puede hacerle nada, y que no estamos en Estados Unidos, que aquí los perros y cualquier otro animal no tienen derechos así que con mayor razón puede hacerles lo que se le venga en gana.
Lamentablemente tiene razón, mientras no se apruebe la Ley Estatal a favor de los Derechos de los Animales, muchas personas seguirán abusando de ellos, por eso urge que este proyecto llegue a su etapa final que es la aprobación. Es una ley que nos hará ser mejores como sociedad, por supuesto deberá acompañarse de una fase de educación para que se implemente una cultura de respeto a los animales y de esta ley, pero de esa fase de educación con gusto nos hemos encargado varios protectores de animales en todo el estado, desde nuestras trincheras y con nuestros recursos, toca ahora el turno a los legisladores para que den marcha a un proyecto que beneficiará no sólo a los animales, sino insisto, también a las personas y sobre todo a las generaciones futuras.
Esta semana surgieron inconformidades del sector gallero, explican entre otras cosas, que las peleas de gallos y la crianza de estos animales, da trabajo a “miles de familias”, que de no ser por ellos ese animal estaría extinto y que el cine ha pintado muy sangriento esta práctica, que ellos cuidan y atienden con veterinario a los gallos, yo sólo les puedo decir de manera respetuosa que si nos ponemos a hablar de números son demasiadas personas y asociaciones, tal vez un número igual o SUPERIOR que piden esta ley porque ya estamos cansados de que se abuse de los animales, quienes está comprobado que también tienen un sistema nervioso que les hace sentir dolor o placer, los animales no pelean por sí solos a menos que se les confronte, ustedes mencionan que cuidan a sus animales que bueno si así es, pero hay otras empresas que no lo hacen y lo constatamos a diario con los reportes que nos envían, por eso es necesaria esta ley, queremos un trato humanitario a los animales.
Estamos acercándonos a una etapa de evolución como sociedad en la que al hablar de los derechos de los animales se habla también de un avance en todos los aspectos, atrás deben quedar las prácticas retrógradas y crueles por diversión o ignorancia, los niños merecen un futuro libre de violencia, un estado moderno, España ya logró este cambio que parecía imposible y Veracruz también lo hará, al tiempo. gaem80@hotmail.com