GRANDEZA EN LA DERROTA 

Por Ernesto Partida Pedroza

La mejor manera de conocer a las personas, no es cuando triunfan, sino cuando son derrotadas.

Ahí se ve de que materia estás hechas las personas.

Esto viene a cuento por el encuentro que sostuvo el gobernador electo de Hidalgo Francisco Olvera y Xochitl Gálvez, su rival en las elecciones para gobernador del estado.

Los ex candidatos antagónicos en la pasada contienda electoral del estado de Hidalgo, decidieron abrirse al diálogo para impulsar una agenda conjunta que incluya las propuestas de campaña de la alianza Hidalgo Nos Une (PAN, PRD y Convergencia) y del gobierno de la administración 2011-1016, encabezado por el priista Olvera Ruiz.

Los ex contrincantes, compartieron un desayuno en un restaurante del sur de la ciudad de Pachuca, donde firmaron el documento para una agenda conjunta que formará parte del Plan Estatal de Desarrollo 2011-2016.

El documento signado por Olvera y Gálvez indica que en el tema de desarrollo tecnológico en Hidalgo principalmente se propone disponer elementos tecnológicos para centrar la actividad educativa en el aprendizaje y la adquisición de herramientas para el auto-aprendizaje; ampliar el alcance, cobertura y calidad de los servicios educativos; actualización del capital humano para apoyar los proyectos de modernización gubernamentales, universitarios y empresariales para el combate a la pobreza, entre otras.

Finalmente Gálvez Ruiz subrayó que prefiere unir esfuerzos con la administración de Olvera Ruiz a ser un enemigo más de la administración gubernamental.

“Seguiré siendo crítica donde tenga que ser crítica y reconocerá lo que tenga que reconocer y ayudaré en lo que tenga que ayudar”, expresó Gálvez.

Estos son los signos de grandeza de Xochitl Gálvez que contrasta totalmente con la actitud de Andrés Manuel López Obrador.

Gálvez fue perseguida durante la campaña y obstaculizada en todas las formas posibles para que hiciera su campaña y aún así acepta tener una agenda conjunta con el gobernador electo.

No pidió nada para lo personal, solo el compromiso para los hidalguenses, ¿Acaso no es este un signo de grandeza?

Contrasta con la actitud de López Obrador al llamarle espurio a Calderón, su intolerancia a la frustración lo llevó a auto nombrarse “Presidente legitimo”, hasta mando hacer una silla para la toma de posición en el zócalo, actitud que raya en lo ridículo.

Acordémonos del plantón de Reforma, acción que causó muchas molestias a sus propios simpatizantes.

López Obrador fue el principal impulsor de la reforma electoral del 2008 que más bien fue un retroceso.

Es un personaje que ha mandado al diablo a las instituciones cuando éstas no se acoplan a sus intereses personales.

El 2006 quedó atrás, pero el personaje sigue vigente porque quiere nuevamente ser candidato para ocupar la presidencia.

Otra cosa hubiera sido si hubiera aprovechado el capital político paras organizar al pueblo para luchar verdaderamente contra la pobreza y todos los males por los que él dice luchar.

Xochitl Gálvez nos da una lección de grandeza y humildad que debiéramos aquilatar.

Hace unos días el presidente Calderón decía que el próximo candidato del PAN pudiera ser alguien no necesariamente salido de las filas del PAN, ahí está una posible candidata de la que poco se ha hablado para la grande, pero que considero que tiene los arrestos para el puesto.

¿Usted que opina?

¿Votaría usted por Xochitl Gálvez para presidente?