NIÑOS INDÍGENAS SUFREN LOS HELADOS TEMPORALES.
POR: RAFAEL HERNANDEZ R.
OMOQUILA, RAFAEL DELGADO, VER.
DICIEMBRE DEL 2014. Descalzos, sin comer y sin nada que ponerse y el fuerte
frio No 24 amenazando a las familias de las zonas indígenas, sigue pegando a
los niños, como en el caso de José Citlahua.
Quién vive en el monte de Omiquila,
ahí solito y sin que nadie lo pueda ayudar ya que tanto sus padres como sus
amigos vecinos están en las mismas condiciones inhumanas.
La ayuda no llega tan fácilmente o es
difícil escoger a niños en extrema pobreza y otra es que lo que envía la
secretaria de protección civil no alcanza ni abastece a todos y cada uno de los
niños.
No tienen chamarras, suéter, ni
cobijas, mucho menos calzado y otros jugando fut con guaraches, es triste la
realidad de los niños en la sierra de Zongolica, principalmente en las
comunidades y estas como Tzoncolco están a una hora de la ciudad.
Sus padres viven del carbón y leña, si
hay venta solo les alcanza para medio comer frijolitos con más agua pero no
para vivir mejor ni para darse el lujo de tener unos zapatos o una chamarra que
les abrigue de estos fuertes fríos que les pega a los niños y a los abuelitos
principalmente.