El alcalde del municipio
Libertador de Caracas (capital venezolana), Jorge Rodríguez, presentó este
miércoles las pruebas de que en Venezuela se lleva a cabo un golpe de Estado
continuado y dejó al
descubierto un plan de magnicidio contra el presidente Nicolás Maduro, elaborado por representantes de la
oposición y empresarios venezolanos con el apoyo del Departamento de Estado y
el embajador de Estados Unidos en Colombia.
Recopilacion: David Adriano B. |
Planes de asesinato
contra el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, el gobernador del
estado Aragua (norte-centro), Tareck El Aissami, el ministro de Interior y
Justicia, Miguel Rodríguez Torres, también se reflejan en los correos
electrónicos revelados este miércoles.
El también miembro de la
directiva del Partido Socialista Unidos de Venezuela mostró las pruebas que
forman parte de una
investigación criminal y penal que la justicia venezolana viene llevando a
cabo.
Subrayó que el Golpe ha sido desactivado
“en esta fase”. “Ellos saben que el asesinato del presidente de la
República significaría una situación de violencia en el país y eso es lo que
están buscando”.
“Hacemos esta denuncia para detener esta locura,
para detener este intento y tratar de impedir que estos hechos criminales se
susciten”, dijo, a la vez que agregó que son pruebas de “todos los intentos de la derecha venezolana de acabar con la paz”
y acabar con la constitución.
El funcionario mostró
correos electrónicos enviados por la exdiputada María Corina Machado a varios
representantes de la ultraderecha venezolana, entre ellos el abogado
constitucionalista Gustavo Tarre, el exgobernador y excandidato presidencial
Henrique Salas Römer y al empresario y también excandidato presidencial Diego
Arrias.
Vea en imágenes en
contenido de los correos on.fb.me/1mG3JO4
“Querían un golpe
militar tipo Tailandia”, aseguró. Los señalamientos incluyen aPedro Burelli
(que vive en Miami y es uno de los financistas
de la fiesta mexicana), Roberto Alonso, Eligio Cedeño y Mezerhane,
estos dos últimos: Son banqueros prófugos de la justicia venezolana, no pierden
nada".
El contenido de los
correos
“Ya yo lo decidí y
esta lucha es hasta que este régimen se vaya y le cumplamos a nuestros amigos en el
mundo”, afirmaba Machado al abogado Tarre.
En los correos electrónicos
María Corina hace mención al embajador de Estados Unidos en Colombia, Kevin
Whitaker, y al patrocinio del Departamento de Estado a la oposición venezolana
que intentan desestabilizar y derrocar al Gobierno de Venezuela.
“No le tengo miedo a
nadie, ya Kevin Whitaker me reconfirmó el apoyo e indicó los nuevos pasos, contamos con una chequera más
fuerte que la del régimen".
De igual manera, en los
textos se revela los planes
para atacar las unidades del transporte público, instituciones educativas y demás acciones terroristas que se
han realizado en el país desde el pasado 12 de febrero en el marco de los
planes golpistas.
"(...) calle, más
ingobernabilidad, la acción de los activistas en el metro, metrobús, liceos
bolivarianos, universidades publicas, todo, todo, lo vamos a hacer hasta el
final”.
Señaló que con esas
evidencias se demuestra la
verdadera responsabilidad de Machado en los actos de violencia que se suscitaron el pasado 14 de
febrero, “el golpe ha sido desactivado en esta fase, aún cuando quedan algunos
focos de violencia”.
Por su parte, el
exdirectivo de Petróleos de Venezuela Pedro Burelli, le escribe al empresario y
excandidato presidencial Diego Arria “vamos por todo, con todo y contra
todo, contamos con el departamento (de Estado), la embajada (de Estados
Unidos), y ahorita vienen las sanciones del senado. (...) Tomemos como nos
corresponde las calle del país incluidas
eventualmente las del palacio (de Miraflores)”.
Con estas pruebas “queda
demostrado que las
manifestaciones estudiantiles no fueron espontáneas”, dijo el alcalde.
Rodríguez adelantó que mostrarán estas pruebas a los miembros de la Mesa de la
Unidad (MUD) y que ellos digan si son partícipes de estos planes.
Evo Morales: MNOAL debe
enfrentar injerencia de EE.UU. en Latinoamérica
El presidente boliviano,
Evo Morales, destacó este miércoles que una tarea del Movimiento de Países No
Alineados (MNOAL) debe ser enfrentar los intentos invasores que potencias
imperialistas, como Estados Unidos, pretenden materializar en naciones progresistas
y en desarrollo de América Latina y el mundo, destacando entre ellas Venezuela.
Morales participó en la
ceremonia de inauguración de la XVII Cumbre Ministerial del MNOAL, que se
celebra en Argelia, donde instó a todos los Estados que conforman este foro
internacional a unir esfuerzos contra la injerencia extranjera y los ”intentos
invasores de los imperios”.
En ese sentido, resaltó
que Estados Unidos y otras potencias imperialistas buscan crear conflictos en
América Latina y el Caribe, en su afán de ver a esta región dividida, para así
someter a sus gobiernos y posteriormente apropiarse de sus riquezas y recursos
naturales.
De igual manera, el
Mandatario boliviano considera que el MNOAL debe ser un espacio de interacción,
al que los Estados acudan para solventar sus diferencias y trabajar en la
elaboración de una agenda común.
Además, Morales abogó
por el empleo de métodos pacíficos para la resolución de cualquier conflicto
político y social, asegurando que “la paz mundial no será nunca producto de una
carrera armamentista”.
De manera precisa,
Morales se refirió al tema de Venezuela, que ha sido víctima de un intento de
golpe de Estado continuado, desde hace más de dos meses, propiciado por la
derecha de ese país, para crear una guerra civil y solicitar luego una invasión
militar por parte de Estados Unidos.
En ese sentido, el jefe
de Estado rechazó el conjunto de sanciones que el Senado norteamericano pretende imponer
sobre funcionarios del Gobierno venezolano, un hecho que
califica como “grave injerencia” por parte del imperio norteamericano.
La Cumbre Ministerial
del MNOAL se desarrollará durante los días miércoles y jueves en
Argel (capital) y
en ella se abordarán temas vinculados al terrorismo, el crimen organizado
transfronterizo, el racismo y la islamofobia en algunos países de Europa.