EL PROGRAMA
SOCIAL DE CDI SIRVE PARA SACAR DELINCUENTES DE LA CARCEL
Gerardo
Oropeza Santiago
Zongolica,
Ver.- Un programa social del CDI, no fueron previstos los alcances, ha habido
casos que se comente injusticias como en el caso de los pagos de fianzas para
que salgan libres los supuestos infractores de la ley, donde algunas veces
sacan a personas que verdaderamente están acusadas por delitos que ellos
comenten como es incumplimiento de obligaciones de asistencia familiar,
saliendo libres sin ningún contratiempo y dejando en el desamparo a su familia.
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Isabel Perez Santos, Delegada
Estatal del CDI.
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María Elena
Gálvez Xochiquiquixtle de la comunidad de Tepetlampa del municipio de San Juan
Texhuacan, denunció ante la Agencia Especializada en Delitos Contra la Familia
en Zongolica a su marido Eusebio Quiahua Calihua, por Incumplimiento de
Obligaciones de Asistencia Familiar, en el mes de abril del presente año, donde
las autoridades ministeriales le comprobaron el delito y lo remitieron a la
cárcel de esta población, pero al paso
de los meses intervino el CDI y pago su fianza de 15 mil pesos, del sujeto para
que saliera libre y sin ninguna obligación de pagar la manutención de sus
hijos.
La afectada
María Elena Gálvez, manifestó que como es posible que la Comisión de Desarrollo
de los Pueblos Indígenas, ocupe el dinero de los nativos, para sacar en
libertad a personas acusadas de un delito y precisamente contra la familia,
Isabel Pérez Santos, la delegada estatal del CDI, tiene que poner cartas en el
asunto, ya que veladamente protege a esta gente.
También se
debe de investigar porque en la Agencia Especializada de Zongolica, la
licenciada Luz María Zepeda Domínguez, traductora del Náhuatl de esta oficina,
solicito 350 pesos, para ayudar a María Elena Gálvez, pero después la corrió y le dijo que se
pusiera a trabajar que no anduviera de pedinche con su marido, así también un
comandante que no supo explicar la afectada a que cooperación pertenecía le
solicito 500 pesos para apoyarla en meter a su conyugue a la cárcel.
Las dependencias judiciales, abusan de los
indígenas que apenas saben hablar el español, como en este caso de la esposa
que quiso recibir justicia pero salió trasquilada, con el programa del CDI.