Crónicas
urgentes
Votos
contados
Claudia
Constantino
Cierto aguisado[RC1]
político veracruzano, que ha contendido en las urnas en más de una ocasión y
por distintos partidos, me explica con absoluta paciencia y lenguaje mundano
por qué en una elección competida es tan importante la participación ciudadana,
sobre todo “las puestas a tercios”, donde cualquiera de los tres primeros
partidos en la preferencia electoral tiene oportunidad de ganar.
Observa su café, como si se tratara
del oráculo y buscara en el negro líquido verdades absolutas. Sin levantar la
vista, me dice: “con una votación raquítica y en una diferencia cerrada, el
margen de maniobra para el fraude es grande; gana el que cuenta los votos. Y el
OPLE ya sabemos quién lo controla. La única forma de ganar, es evitar llegar a
los tribunales, donde siempre se resuelve a favor del partido oficial, y para
eso la diferencia tiene que ser contundente, prácticamente de 6 a 1”.
“Pero eso es muchísimo”, le respondo
con cara de incertidumbre. Entonces insiste: “Sólo así puede ganar la
oposición: sin discutirlo, sin negociarlo. Arrasando. Y para eso se necesita una ciudadanía
convencida de que su voto es útil. Nos han ganado tanto terreno la desconfianza,
la apatía y la decepción. Cada ciudadano que no participa en una contienda
electoral, trabaja a favor del sistema que tanto odia y del que tanto reniega”.
¿Qué se puede hacer? “Ir despertando
conciencias. Si les dan el plasma, la lámina, la despensa, la tarjeta, el
dinero, que lo agarren, pero que voten libremente. Que sepan que cada vez que
entregan su credencial a cambio de algo de esto, están ayudando a que su
situación no cambie. Eso que están recibiendo sólo dura unos días, y su miseria
se perpetúa”.
Pero la gente ya no cree en nadie.
Todos los partidos políticos les han prometido y no les han cumplido. El
descrédito de la clase política es total. Entonces los votantes se concentran
en la inmediatez. Creen que sólo cambiarán los partidos, pero todos los
políticos actúan de la misma manera deshonesta. ¿Cómo devolver la esperanza a
la gente ante tanta impunidad? “Cumpliendo los castigos ejemplares. No creo que
vaya a haber vómito negro pero, si realmente se castigara a algunos culpables
del terrible desfalco financiero de Veracruz, eso influiría inmediatamente en
el ánimo de la gente y fomentaría la participación”.
Lástima que esa sea otra promesa de
campaña, pienso. En la cronología electoral primero tendría que ganar la
oposición, arrasando, para que tales castigos llegaran, y no a la inversa. La
única forma de ganar se ve lejana. La alternancia sólo puede llegar en una
copiosa votación y una amplia diferencia de votos entre el primero y el segundo
lugar. ¿Cómo se logra eso en un estado donde la oposición muestra una larga lista
de expriistas de oscuro pasado?
Para que el voto cuente, habremos de
inventar nuevas formas. Todas las conocidas se ven improbables o arcaicas.
Sobran las preguntas; habrá que ir buscando respuestas. Urgen las respuestas.
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