Crónicas urgentes
La alianza más cara
Claudia Constantino
Cuando
los detractores de Miguel Ángel Yunes Linares se empeñan en recordarnos su
fortuna, echan mano de los ejemplos más burdos para ejemplificar su poder
económico y, por alguna extraña razón, para no sugerir que por falta de talento
nunca se refieren a una de sus mayores inversiones recientes: la alianza entre
el PAN y el PRD.
También de modo inexplicable
trascendió que el gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, ofreció mucho
dinero a los consejeros panistas y perredistas, a través de sus “operadores”,
para tratar de descarrilar la alianza; intento que fue muy difundido por los
propios consejeros quienes, en su afán de alzarse como ejemplo de honestidad,
narraron el modo en que se negaron a tomarlo. Lo que casi no se comentó fue que
del otro lado les ofrecieron más, mucho más, no sólo dinero.
En los últimos tiempos, quienes
seguimos el discurso político, tan polarizado, del PRI y de la Alianza PAN-PRD,
nos preguntamos: ¿acaso Miguel Ángel Yunes habrá comprado a todos los
estrategas del PRI? ¿Cómo pueden dejar que aproveche cada desatino del gobierno
del estado y del precandidato priista sin alcanzar a revirar con eficiencia uno
solo de sus mensajes?
Todos los aspirantes a la gubernatura
de dos años mienten, dicen verdades a medias y ocultan información; los mueven
sus intereses. No hay ideología ni institucionalidad partidista. Vemos a
priistas respaldando a panistas y todas las combinaciones o descombinaciones
posibles, todo son intereses de grupos o de actores políticos.
En las semanas que siguieron al
anuncio de la conformación de la Alianza PAN-PRD, hemos observado cómo el PAN
hace campaña por su parte y el PRD opera el coto de poder que le dejaron en
pago a la visión de sus dirigentes de firmar para ir “Unidos para rescatar
Veracruz”. Negocian candidaturas en los distritos que les fueron concedidos,
recorren el estado con precario presupuesto, en espera de que don Miguel saque
su guardadito, y no se muestran muy dispuestos a invertir.
Tal vez hacen cálculos para
concentrar esfuerzos en los distritos con mayores posibilidades, entre los que
les tocaron. Como sea, se muestra una alianza muy costosa para Miguel Yunes
Linares que, aunque se entiende, no deja de ser un lujo. Sus aliados, además
del membrete perredista, no parecen muy dispuestos a hacerlo ver como el
estadista que debería suceder a Javier Duarte de Ochoa y, ya de paso,
encarcelarlo como promete en cada aparición pública.
Antes de que comience la segunda
quincena de marzo, arrancarán las campañas, y habrá que poner más atención a
las propuestas. Ojalá que la promesa de encarcelar a los saqueadores de
Veracruz sólo sea el aperitivo, pero que alguien realmente esté pensando en
todo eso que necesita Veracruz, después de tantos años en la era negra del
fidelato-duartismo. Ávidos de conocer las propuestas, es como deberíamos estar
los veracruzanos; que nos digan cómo le vamos a hacer para salir de tan
lamentable estado, y con quiénes, por aquello de los grillos reciclados.
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comentario para esta columna que hace algunos cálculos a:
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