Místicos
y Terrenales
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Reventar la elección para protegerse
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Silva regresa ¿por más?
Marco Antonio
Aguirre Rodríguez
El gobierno del estado ha
soltado señales de que mantiene una relación estrecha con Héctor Yunes, sobre
todo presumiendo su control sobre el Organismo Público Local Electoral del
Estado, a través de Gabriel Deantes.
La validación de que en la
realidad esto es así, se hizo a través de uno de los columnistas que el
gobierno del estado utiliza para difundir lo que quiere decir, que no pueden
colocar en boletines oficiales.
Pero, de hecho, desde antes,
ya se había mencionado que así era; incluso la referencia hacia los actuales
consejeros electorales es que fueron escogidos por el mismo Gabriel Deantes en
su calidad de “operador político” de Javier Duarte.
Pues bien la versión soltada
de que Gabriel Deantes controla el OPLE y que es el enlace para “sacar
acuerdos” ha sido precisamente para tratar de crear la imagen de cercanía,
cuando Héctor Yunes y los hectoristas lo que buscan es el mayor distanciamiento
posible.
Una muestra, Sonia Sánchez la
(¿ex?) esposa de Patricio Chirinos, que regresó a la entidad: “he escuchado
comentarios muy tristes de este gobierno y de sus integrantes”, dijo en una
reunión con periodistas, donde no quiso hablar de Javier Duarte.
Entonces, si Gabriel Deantes
es el encargado de la “operación electoral” por parte de Javier Duarte, y quien
controla el OPLE, y a este Organismo no le han dado los recursos para organizar
el proceso electoral, se está ante un panorama que puede llevar hasta las sospechas
de traición al candidato priista al gobierno del estado por parte del aparato
ligado al fidelato.
Una de las versiones que
corren es que Javier Duarte buscó pactar con Miguel Ángel Yunes una transición
en la que el Yunes azul le respetaría la libertad al actual gobernador y a su
grupo cercano.
Las irregularidades en la
entrega de los recursos al OPLE fortalecen este rumor, porque al no hacerse una
elección debidamente bien organizada, se abren las puertas para impugnar el
resultado, cualquiera que sea.
Si esto ocurre así, y las elecciones tienen que
irse a una segunda vuelta prácticamente, el tiempo de gobierno para el próximo
mandatario será todavía menor de 2 años y aún menos la próxima administración
podrá procesar a los miembros del fidelato por las atrocidades cometidas en
este sexenio y mucho menos en el anterior.
Entonces,
también puede ser que la idea sea simplemente crear el caos para ganar tiempo y
cimentar la impunidad.
Como sea, el
gobierno de Javier Duarte está jugando en contra de los intereses del candidato
del PRI, porque las irregularidades se achacan, de inmediato, a que se provocan
para favorecerlo.
La especie de
que Gabriel Deantes es quien negocia con Héctor Yunes y su equipo, también es
contraria a los intereses electorales de Héctor Yunes, sobre todo porque entre
los hectoristas la imagen es que Gabriel Deantes es precisamente de los
funcionarios públicos que más se ha enriquecido durante los últimos 6 años y
una muestra de ello es su casa en la zona de las Animas, donde incluso hasta
elevadores hay, según presunciones del mismo Secretario de Trabajo
La imagen de
Javier Duarte cada día es peor, tanto en el estado como en el país e incluso ya
a nivel internacional lo ponen como muestra del mal gobierno en México.
Por lo pronto la
creación del caos en el proceso electoral se hace.
Y esto perjudica
a Héctor Yunes, irremediablemente.
Y ¿beneficia a
otros?
Los místicos que
hoy se sienten grandes, no quieren dejar el poder y tratan de llenar todo de
confusión para mantenerse.
Los terrenales
cada vez los repudian más.
SILVA REGRESA
¿POR MÁS?. En la Coordinación de Comunicación Social del
gobierno de Veracruz, habrá cambio de titular. Eso no es lo nuevo, si no lo
importante es que el movimiento se da por cuestiones de dinero, de beneficio de
grupos.
Y la mejor
muestra de que esto es así, es la discusión del monto de las deudas en la
Coordinación de Comunicación Social: 1,200 millones de pesos cuando Gina
Domínguez dejo el cargo; 1,500 millones cuando salió Alberto Silva.
¿Cómo es posible
que una dependencia que en el 2015 tuvo un presupuesto de 304 millones
acumulase tal adeudo?.
¿Cuánto dinero
más quieren exprimirle al presupuesto del gobierno del estado?.
Alberto Silva
dejará la diputación federal porque la misma -¡obviamente!- le deja menores
ingresos que la oficina de Comunicación Social del gobierno del estado.
¿Qué va a
arreglar?.
¡Nada!
La vez anterior
que estuvo en el cargo terminó peleado con todos los medios distintos a los del
circulo del gobierno del estado.
Alberto Silva en
mucho es culpable de la pésima imagen internacional que tiene Javier Duarte y
del gasto excesivo y la gigantesca deuda en medios de comunicación que tienen.
El pasivo con
medios de comunicación se elevó en tan gran medida porque se tenían (¡tienen!)
“convenios” multimillonarios con varios medios, entre ellos periódicos que se
regalan y que carecen de publicidad comercial, como los periódicos “El Heraldo”
y “Capital”, los primeros propiedad de un primo de Karime Macías, Eduardo
Sánchez Macías, en los que también es socio el papá de la esposa del
gobernador, Tony Macías, y el segundo ligado a un grupo de medios que maneja
directamente la exvocera del gobierno del estado, Gina Domínguez.
En gobierno del
estado buscaron denostar al ahora saliente Coordinador de Comunicación Social,
Juan Octavio Pavón, asegurando que fue cesado por andar de vacaciones durante
Semana Santa en Nueva York.
La otra versión
es que había renunciado desde finales de febrero, cansado de los cobradores, de
no tener para pagar las facturas pendientes, y de las amenazas y presiones para
que incrementase los “convenios” con los medios “amigos” del gobierno del
estado, sobre todo los ligados a Gina Domínguez y a Alberto Silva,
precisamente.
Juan Octavio
dejó de pagar, porque no le daban dinero para hacerlo y ante el panorama en que
se encontraba dejó de recibir facturas para no seguir incrementando la deuda.
La versión de
Pavón es que también ya estaba hasta la m… coronilla de que lo culpasen de la
mala imagen de Javier Duarte, la cual se ha labrado el mismo mandatario a
pulso.
O sea, Juan
Octavio sale por no seguir alimentando los ginimedios.
Que cambio las
oficinas a donde se cobra una renta exorbitante, eso no influyó; que haya
dejado por los suelos el raiting de Radio Televisión de Veracruz, tampoco.
Si lo
despidieron o si renuncio, es discusión entre ellos.
