Rafael Delgado, Veracruz., 12 de agosto de 1010.- El alcoholismo y la drogadicción, pero más aun la nula convivencia con sus familias, provoca en los niños y jóvenes, buscar refugio en las llamadas bandas pandilleriles, así lo reconoció el Procurador de la Defensa del Menor la Familia y el Indígena del Dif municipal licenciado Carlos Morales de Jesús.
Entrevistado luego de atender a una persona que había denunciado a su yerno por haber golpeado a su hija, tras haber ingerido aguardiente, el profesionista, agrego que al igual este tipo de problemas se vuelven cotidianos, sin embargo a las mujeres se les orienta sobre lo que deben de hacer para evitar sigan siendo golpeadas por sus parejas.
Y en lo referente al problema que al igual se batalla a diario por parte de la policía local, para controlar a las bandas de jovencitos que también causan desmanes en el pueblo, Morales de Jesús, dijo haber analizado este tipo de fenómeno social, encontrándose que los niños y jóvenes que integran las bandas juveniles, provienen de familias desintegradas.
Eso ocasiona que ellos busquen refugio con personas de su edad, solo que en la gran mayoría de los casos, son inducidos a cometer desmanes.

Ejemplifico el caso donde un grupo de chamacos de la cabecera municipal, intento jalonear a una niña justamente cuando regresaba a su domicilio, se tuvo que intervenir con la policía, y en este momento se encuentra en análisis el problema.