NAVIDAD: FIESTA DEL AMOR, UNA DE LAS 3 CELEBRACIONES LITÚRGICAS MÁS IMPORTANTES DEL AÑO
POR: OSCAR PAZ SERRANO
Orizaba Veracruz, diciembre 25 del 2011.- La Navidad (latín: nativitas, «nacimiento»,) es una de las fiestas más importantes del cristianismo —junto con la Pascua y Pentecostés—, que celebra el nacimiento de Jesucristo en Belén. Esta fiesta se celebra el 25 de diciembre por la Iglesia católica, la Iglesia anglicana, algunas otras iglesias protestantes y la Iglesia ortodoxa rumana; y el 7 de enero en otras iglesias ortodoxas, ya que no aceptaron la reforma hecha al calendario juliano, para pasar al calendario conocido como gregoriano, del nombre de su reformador, el Papa Gregorio XIII.
Los angloparlantes utilizan el término Christmas, cuyo significado es ‘misa (mass) de Cristo’. En algunas lenguas germánicas, como el alemán, la fiesta se denomina Weihnachten, que significa ‘noche de bendición’. Las fiestas de la Navidad se proponen, como su nombre indica, celebrar la Natividad (es decir, el nacimiento) de Jesús de Nazaret.
La celebración de esta fiesta Hoy 25 de diciembre se debe a la antigua celebración del nacimiento anual del dios-Sol en el solsticio de invierno (natalis invicti Solis) adaptada por la Iglesia católica en el tercer siglo d. C. para permitir la conversión de los pueblos paganos.[]
Por tanto, para algunos historiadores la celebración de la Navidad histórica debería situarse en primavera (entre abril y mayo), y para otros, siguiendo el relato de Lucas 2:8, que indica que la noche del nacimiento de Jesús, los pastores cuidaban los rebaños al aire libre y que el cielo estaba lleno de estrellas, es poco probable que este acontecimiento hubiera ocurrido en el invierno (hemisferio norte). La Iglesia cristiana mantiene el 25 de diciembre como fecha convencional, puesto que en la primavera u otoño la Iglesia celebra la Pascua.
Significado de la Navidad : Esta fiesta tiene una doble proyección:
· Recordar el inicio de la redención con el Nacimiento del Salvador, el misterio central de nuestra fe es la Resurrección de Cristo –la Pascua- como este suceso abarca toda la vida de Jesús, celebrar la Navidad es solemnizar el proceso inicial de nuestra salvación, de nuestra Pascua.
· Acoger ahora al Señor que quiere nacer en el corazón del hombre. La fiesta de Navidad invita a reflexionar sobre el amor de Dios que viene a los hombres. El Cristo que tomó parte en la historia de los hombres, hace dos mil años, vive y continúa su misión salvadora dentro de la misma historia humana. Navidad es un acontecimiento divino y humano, que será siempre actual, mientras haya un hombre en la tierra.
La Navidad enriquece la visión del plan salvífico de Dios y lo hace más humano y, en cierto sentido, más hogareño. Aunque esta fiesta apunta también a la celebración de la Pascua , la preparación para vivirla –el Adviento- tiene un tono muy diferente, sin dejar de invitarnos al arrepentimiento y a la conversión, el ambiente que se vive en estos días, es en general, festivo y lleno de esperanza y alegría.
La Navidad es la fiesta más celebrada por los hombres. Hasta los ateos y los enemigos de la Iglesia se detienen y celebran, a su manera, este acontecimiento de salvación. Es el recuerdo más universal y más gustado que el mundo tiene de Jesucristo. Pero, además de ser un recuerdo, la fiesta de Navidad es una acción salvadora para el hombre actual. Es el Dios inmenso y eterno que desciende a tomar la condición humana e irrumpe en el tiempo del hombre para que éste pueda alcanzarlo. Nadie, aunque quiera, puede permanecer al margen de este misterio. El mundo entero acepta el acontecimiento del nacimiento del Señor, como la fecha central de la historia de la humanidad: antes de Cristo, o después de Cristo.
Historia: Ya desde el año 380, la Iglesia española celebraba la Navidad el 25 de diciembre y la Epifanía el 6 de enero. La primera, como en Roma, para conmemorar el nacimiento de Cristo; la segunda, para recordar la manifestación del Señor a los magos de oriente, es decir a todos los pueblos.
Para reflexionar: al principio de la evangelización lo pagano se transformaba en cristiano, ahora, ¿no será que lo cristiano se está "vaciando" cada vez más de Cristo? ¿Eres cristiano?, entonces… ¿cómo celebras la Navidad ? ¿A quién festejas realmente?
Celebración litúrgica: La celebración del misterio de Navidad comienza desde la tarde del 24 de diciembre, hasta la noche del día 25. En menos de 24 horas, la Iglesia proporciona a quienes quieren celebrar la venida del Señor, 12 lecturas bíblicas llenas de mensaje para una vida comprometida.
El día de Navidad para los católicos es día de precepto, es decir, se debe asistir a Misa aunque no sea domingo, pudiendo cumplirse este precepto si se asiste el 24 de diciembre por la tarde o a cualquier Misa del día 25.
Con la Misa vespertina del día 24 termina el tiempo de Adviento y se entra en la celebración del misterio navideño. Se leen textos del Profeta Isaías, anunciando con alegría la llegada del Salvador a celebrar sus bodas con la humanidad; de los Hechos de los Apóstoles, con el primer discurso de San Pablo, que da testimonio de Cristo, hijo de David, que viene a salvar a su pueblo; y desde luego, del Evangelio, con el relato del nacimiento de Jesús en Belén.
Hay tres Misas diferentes más durante este día, –25 de diciembre- con lecturas que enriquecen la meditación sobre el Misterio de la Encarnación. Los católicos asistimos regularmente solo a una de ellas, sin embargo, la Iglesia aconseja que los textos bíblicos de las cuatro celebraciones sean leídos durante esos dos días en los hogares católicos, aprovechando que las familias enteras acostumbran reunirse alrededor de la mesa. Con esta práctica se crea un ambiente propicio para la meditación y aceptación de Jesús Salvador en la vida de cada uno, motivando así a un cambio positivo en la vida.
“pero sin duda alguna que este es un acontecimiento muy importante por qué creo que es de los más nobles, el de la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo responde a resucitar a un Jesucristo que te exige y que te pone de frente al gran misterio de la Reconciliación con el Padre, pero el acontecimiento de la Navidad no tiene algo así como que fuerte si me permiten la palabra así cómo que de noble en cuánto a que es Dios en la inocencia de un niño, entonces eso pues sensibiliza no, nada te va a sensibilizar más que un bebe, que el llanto de un bebe, que el dolor de un bebe y la sonrisa de un bebe, ósea te doblas realmente ante ese acontecimiento, que es uno de los acontecimientos más bonitos, que no piensas en otra cosa sino en Paz, sino en gozo, en armonía y vas pensando en todas esas cosas y que propiamente es la sencillez de los pastores la que los hace dignos, del gran privilegio, de la exclusiva de los ángeles que les dicen: ¡Ha nacido el Salvador! Les traemos una buena noticia, creo que hoy todos podemos amanecer con un corazón en Paz y desde Hoy, tener un corazón en Paz por qué se nos anuncia un gran acontecimiento: Ha nacido el Salvador y nace para traernos su reino a traernos Paz, sin duda Hoy todo huele a Dios.
Aunque debo reconocer que a veces huele a violencia, a veces huele a muerte, a veces huele a peligro, huele a intranquilidad, pero hoy debemos de hacer precisamente conciencia de eso: el que no crea en Dios, que deje un poquito actuar a sus sentidos y huele a Dios, yo diría eso, que deje actuar a sus sentidos y este día sin duda, Huele a Dios, huele a Paz, luces de colores que nos encontramos en las calles, los arreglos en las casas: Huele a Dios, entonces yo creo hay que ser sensibles a eso no, es el momento de dejar atrás lo negativo, a veces cuándo tu respiras en la noche una flor, cuándo respiras un buen aroma, dices: ¡Ah que rico huele! Bueno pues también que se respire ese ambiente de Dios y ojala que los siguientes días para los demás huela a Dios, incluso para el que no cree, solamente así podemos recuperar la Paz , con algo trascendente y el hombre se ha quedado en las cosas materiales y por eso huele a materialismo, huele a desconfianza, huela a todo, el mismo dinero huele feo, pero si dejamos que Huela a Dios, huele a Paz, huele a Armonía. Él de las espadas forja arados y de las lanzas podaderas y así esperamos que la violencia que vivimos el Señor forje la Paz ” Explicó el Director de la Pastoral de Medios de Comunicación en la Diócesis de Orizaba, Presbítero Marcos Palacios Cárdenas.
Hoy Domingo 25 de Diciembre, dado que muchos fieles están desvelados, el horario de las celebraciones litúrgicas en el Templo de Nuestra Señora del Carmen será únicamente de 12:00 y 19:00 horas, mientras que en la Catedral de San Miguel Arcángel los horarios serán los habituales: 7:00, 8:30, 10:00, 12:00 horas (celebración presidida por el Obispo Marcelino Hernández Rodríguez) 13:30. 17:00. 18:30 y 20:00 horas.