La fundación Isidro Fabela no es avanzada política de Peña Nieto, asegura el tío Arturo
Asegura que este organismo es un proyecto cultural alternativo “para direccionar al país en la cultura”
La fundación cultural Isidro Fabela A.C. no es una avanzada política, es una avanzada cultural, aseguró su Presidente nacional, Arturo Peña del Mazo durante su estancia en la ciudad de Xalapa donde tomó protesta al comité directivo de esta fundación en el estado.
Enfatizó que esta fundación es un proyecto cultural alternativo para direccionar al país en la cultura; “la cultura no pretende gobernar, porque si fuéramos por el poder habríamos creado un partido político”, abundó.
En conferencia de prensa previa a la toma de protesta del comité estatal, que estará presidido por Ernesto Alarcón Trujillo y tendrá como presidente del consejo consultivo a Alejandro Díaz de León Martinez, Peña del Mazo dijo que con la cultura se pretende que México alcance el súper desarrollo a través de la cultura, “ya que todo el avance, el progreso y el desarrollo que ha habido en el mundo desde que el ser humano puso su pie en el planeta han sido desarrollos de carácter cultural en cualquiera de sus tres vertientes”.
Detalló que estas vertientes son en cuanto a las formas de hacer del ser humano que hoy en día se llaman tecnología, desarrollo en cuanto a las formas de ser del ser humano que se llaman artes y desarrollo en cuanto a las formas de convivir del ser humano que es la civilización, por lo que reiteró que cualquier progreso del País está vinculado a éstas.
La manera de trabajar de esta fundación, en palabras de su presidente nacional, es primero explicarle a la gente en qué consiste la cultura, “porque hoy la gente piensa que la cultura son otras cosas que están ligadas más bien a la tradición.
Piensan que la cultura son los festejos en donde la gente junta dinero todo el año para gastárselo en cuetes, alcohol y comida el día que celebran algo, lo cual es tradición, no es cultura”.
Dejó claro que si bien es cierto que en la cultura hay cosas buenas, también hay creencias fundamentales que utiliza el pueblo mexicano, como lo son las supersticiones, mitos, dogmas y prejuicios “a mares”.
En este tenor citó: “estamos viendo en una época que es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio”, ya que un prejuicio lo echan por la puerta y se vuelve a meter por la ventana. Abundó que no sólo son los prejuicios los que rigen el actuar de las personas, “también hay convencionalismos, enigmas, misterios, contradicciones, sincretismos. Una serie de barbaridades que son creencias fundamentales del pueblo de México y que están significando atrasos fundamentales”.
Peña del Mazo aseguró que la inseguridad que se vive en el país, si tiene que ver en la falta de cultura, aunque no lo es todo, ya que aseguró que la cultura incide en las culturas de una sociedad, “las costumbres son la cultura, ahí se conserva a nivel social, pero a nivel individual la cultura es la conducta, que no es otra cosa que las expresiones de palabra y obra del ser humano”.
“México no ha perdido la dirección de la cultura, pero tampoco la ha tenido nunca. Hay intentos incipientes de manejar la cultura, pero no han logrado direccionarla”, abundó, al tiempo que criticó que muchas de las personas que se encuentran al frente de las dependencias que tendrían que fortalecer la cultura “piensan que con vestirse de lujo, eso es la cultura y sino lo que hacen es traer protagonistas culturales de ultra fronteras”.
Es por ello que enfatizó que con esta fundación pretenden lograr que los mexicanos sean los protagonistas de la cultura y no consumidores de la cultura.
Refirió que la fundación que encabeza tiene presencia en 23 entidades federativas y antes de que termine el año estará en las 32 en los que se divide el País.
Con referencia a la elección de Ernesto Alarcón, dijo que le vieron, al igual que a todos los que integran el comité, “una serie de ventajas que no es fácil encontrar como lo es vocación, antecedente de identificación con la población, credibilidad con la población, capacidad, entusiasmo e interés por México”.
Para finalizar reiteró que la solución para todos los problemas que enfrenta México es la conducta, pero depende de las creencias y de las necesidades de la población.
Enfatizó que esta fundación es un proyecto cultural alternativo para direccionar al país en la cultura; “la cultura no pretende gobernar, porque si fuéramos por el poder habríamos creado un partido político”, abundó.
En conferencia de prensa previa a la toma de protesta del comité estatal, que estará presidido por Ernesto Alarcón Trujillo y tendrá como presidente del consejo consultivo a Alejandro Díaz de León Martinez, Peña del Mazo dijo que con la cultura se pretende que México alcance el súper desarrollo a través de la cultura, “ya que todo el avance, el progreso y el desarrollo que ha habido en el mundo desde que el ser humano puso su pie en el planeta han sido desarrollos de carácter cultural en cualquiera de sus tres vertientes”.
Detalló que estas vertientes son en cuanto a las formas de hacer del ser humano que hoy en día se llaman tecnología, desarrollo en cuanto a las formas de ser del ser humano que se llaman artes y desarrollo en cuanto a las formas de convivir del ser humano que es la civilización, por lo que reiteró que cualquier progreso del País está vinculado a éstas.
La manera de trabajar de esta fundación, en palabras de su presidente nacional, es primero explicarle a la gente en qué consiste la cultura, “porque hoy la gente piensa que la cultura son otras cosas que están ligadas más bien a la tradición.
Piensan que la cultura son los festejos en donde la gente junta dinero todo el año para gastárselo en cuetes, alcohol y comida el día que celebran algo, lo cual es tradición, no es cultura”.
Dejó claro que si bien es cierto que en la cultura hay cosas buenas, también hay creencias fundamentales que utiliza el pueblo mexicano, como lo son las supersticiones, mitos, dogmas y prejuicios “a mares”.
En este tenor citó: “estamos viendo en una época que es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio”, ya que un prejuicio lo echan por la puerta y se vuelve a meter por la ventana. Abundó que no sólo son los prejuicios los que rigen el actuar de las personas, “también hay convencionalismos, enigmas, misterios, contradicciones, sincretismos. Una serie de barbaridades que son creencias fundamentales del pueblo de México y que están significando atrasos fundamentales”.
Peña del Mazo aseguró que la inseguridad que se vive en el país, si tiene que ver en la falta de cultura, aunque no lo es todo, ya que aseguró que la cultura incide en las culturas de una sociedad, “las costumbres son la cultura, ahí se conserva a nivel social, pero a nivel individual la cultura es la conducta, que no es otra cosa que las expresiones de palabra y obra del ser humano”.
“México no ha perdido la dirección de la cultura, pero tampoco la ha tenido nunca. Hay intentos incipientes de manejar la cultura, pero no han logrado direccionarla”, abundó, al tiempo que criticó que muchas de las personas que se encuentran al frente de las dependencias que tendrían que fortalecer la cultura “piensan que con vestirse de lujo, eso es la cultura y sino lo que hacen es traer protagonistas culturales de ultra fronteras”.
Es por ello que enfatizó que con esta fundación pretenden lograr que los mexicanos sean los protagonistas de la cultura y no consumidores de la cultura.
Refirió que la fundación que encabeza tiene presencia en 23 entidades federativas y antes de que termine el año estará en las 32 en los que se divide el País.
Con referencia a la elección de Ernesto Alarcón, dijo que le vieron, al igual que a todos los que integran el comité, “una serie de ventajas que no es fácil encontrar como lo es vocación, antecedente de identificación con la población, credibilidad con la población, capacidad, entusiasmo e interés por México”.
Para finalizar reiteró que la solución para todos los problemas que enfrenta México es la conducta, pero depende de las creencias y de las necesidades de la población.