CECILIO BALTAZAR MIRANDA
La Biblia dice en el libro de Mateo 24;.-Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán.
Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos.
Y para este sábado gente sin escrúpulos que trata de engañar a los pastores los está citando para una “reunión de trabajo” en un conocido hotel de la zona conurbada, y les están ofreciendo dinero.
Aún faltan muchos meses para las elecciones pero los fariseos y falsos cristianos que se han dedicado a vender la iglesia cristiana con la cual han estado lucrando, ya se preparan para volver a lucrar.
Son dos hermanos que no pertenecen a la iglesia cristiana pero que se han acobijado en ella con algunos pastores que aun teniendo un ministerio en la iglesia se desviven por acudir a desayunos y almuerzos con políticos.
Fuentes dignas de todo crédito han informado que personal de la secretaria de gobernación tienen conocimiento de esta reunión y estarán pendientes para tomar cartas en el asunto que pueden llegar a retirar los registros que han dado para predicar a diversos pastores o fijar una multa como la fijaron al gobernador Javier Duarte de Ochoa por ir a una reunión con Peña Nieto en tiempo electoral.
Ojalá que no haya acciones contra pastores por dejarse llevar por gente sin escrúpulos que les están ofreciendo darles un apoyo económico a fin de que hagan acto de presencia y escuchen el mensaje de un político en lugar de escuchar el mensaje de Dios
Más no se dan cuenta de que les hacen como los cazadores que cazan cerdos salvajes en un lugar apropiado en el monte y arrojando un poco de maíz en el suelo.
Los cerdos acuden a diario a comer el cereal que se les ofrece. Una vez que se habitúan a comer allí todos los días, se les pone una cerca de un lado del lugar al que se acostumbraron a ir.
Cuando se familiarizan con la cerca, ellos vuelven a comer el maíz y entonces, se les pone otra cerca del otro lado.
Ellos se adaptan nuevamente y regresan a comer, poco a poco se van instalando los cuatro costados del cercado alrededor de los cerdos, hasta que al final se coloca un portón en el último espacio.
Los cerdos ya estarán habituados al maíz fácil y a las cercas y comenzarán a venir solos por la entrada primitiva.
Es ahí cuando se les cierra el portón y atrapan a todo el grupo'.
Cualquier parecido con la realidad humana es pura coincidencia.”
