Por: Hugo Sánchez Márquez
Orizaba Ver.- Luego de
muchos, muchos kilos de no verse, al medio día de ayer en la grama del Socum se
volvieron a encontrar jugadores de el Astros del Deportivo Orizaba y Los
Albinegros de Orizaba, quienes en la temporada 1991- 1992, militaban en la
Tercera y Segunda División Profesional respectivamente, el juego resulto muy
entretenido de principio a fin quedan empatado a dos goles por bando. Evento
organizado por Richard Paz.
Por el cuadro Asturiano
alinearon Ernesto “el flaco” Vásquez , Gregorio Chavala, Gustavo Beristaín, Raúl
“el caballo” Rendón Erik Ledezma,David Hernández, Mario Lezama, Antonio Ramos, Zenón
Guzmán, Alejandro Escorcia, Miguel
Nolasco, Roberto Salgado, Alfonzo Aranzábal, Jovany Ochoa, Richard Paz,
José Luis Sánchez, Felipe Benítez, dirigidos en esta ocasión por Abraham
Jarquins.
En tanto que por los
Albinegros participaron, José Luis Corona, Rubén Reyes, Roberto Bautista,
Miguel Gutiérrez, Gustavo Condado, Héctor Alba, Rosalio Pérez, Ramón Caracas,
Eligio Gómez, Salvador Galicia, Gerardo Solar, Daniel Perez,Carlos Villalobos, Eduardo Salas,
Miguel Ángel Palacios, Manuel Odilón, Jaime
López, Pedro Juárez , Guillermo Merino y Sergio García, todos ellos dirigidos
por Ariel Rey Monroy.
El encuentro fue jugado
todavía con buen nivel de parte de ambas escuadras, quienes dejaron el
terreno juego tapizado de polilla,
dejando con un buen sabor de boca a los aficionados que como en aquellas
temporadas se daban cita en la grada de Socum. Eligio Gómez abrió el marcador
por Orizaba, mientras que Richard Paz emparejo el marcador, pero una vez mas Gómez
Ruiz, adelanto a su equipo y ya para concluir el propio Alfonso Aranzábal dejo las cifras definitivas de 2-2.
Vale la pena mencionar que
al término de la competencia deportiva ambos equipos compartieron el pan y la
sal en compañía de sus seres queridos, donde les falto tiempo para recordar
todas y cada una de las anécdotas vividas en esa etapa de futbolistas
profesionales, donde estos grupos de buenos futbolistas eran el verdadero
equipo de la ciudad, por la entrega, y el amor a la camiseta que mostraban en
cada encuentro jugando como local.