Camerino Z Mendoza.- La dirección de Protección Civil Municipal, aplicará un diagnóstico en árboles situados en patios y jardines de 15 escuelas de la cabecera municipal, a fin de determinar su condición y salud previniendo posibles riesgos ante el embate de la temporada de suradas.
Desde el inicio de la presente administración se han generado una serie de peticiones ciudadanas a la dependencia, en el afán de que se brinde seguridad a niños, maestros y padres de familia, toda vez que existen árboles en instituciones como las escuelas primarias Josefa Ortiz de Domínguez y Enrique C Rébsamen, así como el kinder Tomasa Valdés y Tenoch y la escuela Guillermo Martínez la cual maneja dos turnos.
La mayoría de peticiones van enfocadas al derribe de árboles o el desrrame, por lo cual la dirección de Protección Civil trabaja a la par con la Dirección de Protección Ambiental no sólo en las escuelas, sino también en parques, áreas naturales y recorridos turísticos donde se espera concluir el diagnóstico para determinar las condiciones de cada ejemplar.
Norberto Becerra Bastard, director de la unidad municipal de Protección Civil señaló que se debe prevenir cualquier situación de riesgo, pues fue la solicitud del alcalde Melitón Reyes Larios al reconocer que el municipio registra presencia de los cinco fenómenos perturbadores.
Por ello, desde los primeros días personal operativo recorre la cabecera municipal y comunidades para identificar factores de riesgo y atenderlos. Entre estos servicios destacan alcantarillas dañadas, situación de los márgenes de ríos, terrenos baldíos, prevención en escuelas y zonas concurridas.
De acuerdo a Carlos Olivares Ramírez, técnico en Protección Civil, el último árbol desrramado fue una Jacaranda de más de 40 años ubicado en la escuela Tomasa Valdez, en calle Melchor Ocampo, entre Mariano Matamoros y Hermenegildo Galeana, que no había recibido mantenimiento desde hace varios años, según refieren las maestras.
Por lo menos dos restos de árboles fueron retirados del cauce del río Blanco, los cuales a manera de presa retenían los escurrimientos de las crecidas, ocasionando desbordamientos hacia calles contiguas y en breve se estaría en condiciones de diagnósticar otras áreas sensibles a incidencias.
