Zongolica; Ver. (LasAltasMontañas). Después de casi un año y seis meses de estar prohibidas las visitas de los familiares de los internos al Centro de Readaptación Social, con el propósito de evitar más contagios derivados por el mortal virus del COVID-19, desde el mes de octubre ya se está permitiendo el acceso a estas instalaciones ubicadas en la cabecera municipal.   

Jueves y domingo, en un horario de 9 de la mañana a 3 de la tarde, son los días en los cuales los familiares de los reclusos pueden acudir a visitarlos en este también conocido como centro de reinserción, aunque los asistentes deberán de cumplir con los protocolos de seguridad como el uso obligatorio del cubrebocas, la utilización del gel antibacterial y pasar por dos filtros sanitarios.

Esos mismos días y horarios, en el pasillo de este inmueble se exhiben artesanías en piel y madera elaboradas por los mismos reos y con las cuales obtienen ingresos que les sirven para alimentar a sus familias y adquirir algunos productos de higiene personal. En ocasiones, revelaron los expositores, se tiene una venta de 2 a 6 mil pesos.

Cabe hacer mención que las citadas artesanías, se llevarán la próxima semana al municipio de Boca del Río, lugar en donde habrá de realizarse una exposición de todos los productos fabricados en los diferentes centros de la entidad veracruzana alusivos a la temporada navideña; en el caso del CERESO de Zongolica, presentarán figuras de alambrón con forma de pinos con luces, entre otros artículos decorativos.  

Como parte de los resultados del Programa de Atención del Sistema Penitenciario en México y atendiendo las recomendaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, desde el mes de septiembre las tres mujeres que estaban recluidas en este sitio, fueron trasladadas hasta el penal de la Toma en Amatlán de Los Reyes.

Aunque el CERESO de las altas montañas, cumplía con los principales requisitos para albergar hasta diez mujeres, la Dirección General cumplió con una indicación de brindarles un espacio más amplio, digno y seguro a las féminas que se encuentran purgando una condena o cuyo proceso de sentencia aún está en trámite a fin de garantizar su derechos y estos no fueran violados.