¿USTED QUÉ OPINA?
DEMANDA CIUDADANA
Por: Alfredo Tress Jiménez
Hace aproximadamente 14 años que me inicié en la actividad política; antes de ello, ejercí mi profesión como responsable de la producción de crías de mojarra tilapia en el centro acuícola de Sontecomapan, perteneciente al municipio de Catemaco, municipio enclavado en la región de los Tuxtlas.
En las diferentes actividades profesionales y políticas a las que me he dedicado, siempre ha existido la demanda ciudadana, lo mismo solicitan apoyo para desarrollar proyectos productivos, reparación o construcción de vías de comunicación, atención en servicios de salud, créditos o apoyos para vivienda, solicitudes diversas de empleo o gestión para obtener preferencia en apoyos que el estado tiene determinado para la ciudadanía, entre muchos otros temas.
Ahora que tengo la oportunidad de conformar la 61 legislatura del estado, las demandas han sido aún mas variadas, desde conseguir plazas de maestros, concesiones de transporte público, atención médica oportuna en los hospitales del estado, construcción de infraestructura, intervenir para resolver conflictos laborales, pensiones alimenticias o invasiones de terrenos, despidos injustificados, esclarecimiento de expedientes en los ministerios públicos, obtención de créditos a la palabra sobre proyectos productivos para el campo, el comercio y la industria, pagos de pasajes para recreación de estudiantes de diferentes municipios del estado a la capital o al puerto de Veracruz, y lo más recurrente y abundante, demanda de espacios para obtener un empleo, sobre todo jóvenes egresados de diferentes profesiones.
De lo vivido desde mi origen en la administración pública como funcionario, y ahora como legislador, siempre me he encontrado con la recurrente demanda ciudadana. Lo sorprendente es que las gestiones que he realizado para atender una petición, casi siempre es atendida, y que decir si la solicitud la puedo subir a oídos del ejecutivo del estado, la respuesta es contundentemente favorable.
Por estas razones muchas veces me he preguntado, ¿que no sería más fácil que los funcionarios atendieran y resolvieran favorablemente al ciudadano común?, ¿ no les sería más fácil atender la demanda ciudadana inmediatamente sin mediar la recomendación?. Si lográramos entender todos los funcionarios de los diferentes niveles de gobierno, que la tarea fundamental es buscar, desde nuestra trinchera laboral, el beneficio a la comunidad, luego entonces tuviéramos un estado y sus municipios de primera; municipios y estado donde lo fundamental fuera servir al ciudadano común, gracias a eso tendríamos menos inseguridad y más desarrollo humano, es por ello que la demanda ciudadana de existir buenos gobiernos disminuiría; no más reclamos por la mala calidad en la infraestructura urbana, no más reclamos por recibir educación de mala calidad o que decir de la salud y seguridad pública, no más reclamos para disponer de vivienda digna, no mas reclamos por preservar el medio ambiente y disponer de agua potable entubada, no mas reclamos de empleos bien remunerados, no más reclamos por la pésima atención de funcionarios a la ciudadanía por trámites engorrosos, tortuosos y con resultados negativos, no más reclamos de que la ley no sea pronta, expedita e imparcial.
Para lograr que no existan reclamos convertidos en demandas ciudadanas, primero se debe elegir razonadamente quién debe ser nuestra autoridad en los diferentes niveles de gobierno, debemos pugnar porque las ofertas de campaña no se conviertan en acciones de gobierno incumplidas, la ciudadanía se debe organizar para exigir a lo que legítimamente tienen derecho, en la medida en que las demandas ciudadanas sean cada vez menos, podemos asegurar que tenemos gobiernos integrados por personas eficaces, eficientes y con visión clara de lo que representa ser funcionario.
Debemos lograr que cada día la demanda ciudadana sea menor, esto se logrará con una ciudadanía organizada, actuante y participativa en las tareas gubernamentales, solo así se obligará a los gobiernos a cumplir como verdaderos mandatarios del poder público, de otra manera, seguiremos escuchando todos los días promesas de campaña convertidas en incumplimientos de gobierno, y consecuentemente una ciudadanía demandante desde el anonimato. ¡Exijamos más, pero elijamos con alta responsabilidad!.
Debemos tener fe en que algún día cambiará la forma de gobernar; pero dependerá en gran medida de la determinación ciudadana por exigir, organizadamente, a lo que se tiene derecho, actuemos y veremos que lo más que puede suceder es que si la demanda es legítima y legal, la respuesta será favorable. ¿Usted qué Opina?
alfredotress04@yahoo.com
DEMANDA CIUDADANA
Por: Alfredo Tress Jiménez
Hace aproximadamente 14 años que me inicié en la actividad política; antes de ello, ejercí mi profesión como responsable de la producción de crías de mojarra tilapia en el centro acuícola de Sontecomapan, perteneciente al municipio de Catemaco, municipio enclavado en la región de los Tuxtlas.
En las diferentes actividades profesionales y políticas a las que me he dedicado, siempre ha existido la demanda ciudadana, lo mismo solicitan apoyo para desarrollar proyectos productivos, reparación o construcción de vías de comunicación, atención en servicios de salud, créditos o apoyos para vivienda, solicitudes diversas de empleo o gestión para obtener preferencia en apoyos que el estado tiene determinado para la ciudadanía, entre muchos otros temas.
Ahora que tengo la oportunidad de conformar la 61 legislatura del estado, las demandas han sido aún mas variadas, desde conseguir plazas de maestros, concesiones de transporte público, atención médica oportuna en los hospitales del estado, construcción de infraestructura, intervenir para resolver conflictos laborales, pensiones alimenticias o invasiones de terrenos, despidos injustificados, esclarecimiento de expedientes en los ministerios públicos, obtención de créditos a la palabra sobre proyectos productivos para el campo, el comercio y la industria, pagos de pasajes para recreación de estudiantes de diferentes municipios del estado a la capital o al puerto de Veracruz, y lo más recurrente y abundante, demanda de espacios para obtener un empleo, sobre todo jóvenes egresados de diferentes profesiones.
De lo vivido desde mi origen en la administración pública como funcionario, y ahora como legislador, siempre me he encontrado con la recurrente demanda ciudadana. Lo sorprendente es que las gestiones que he realizado para atender una petición, casi siempre es atendida, y que decir si la solicitud la puedo subir a oídos del ejecutivo del estado, la respuesta es contundentemente favorable.
Por estas razones muchas veces me he preguntado, ¿que no sería más fácil que los funcionarios atendieran y resolvieran favorablemente al ciudadano común?, ¿ no les sería más fácil atender la demanda ciudadana inmediatamente sin mediar la recomendación?. Si lográramos entender todos los funcionarios de los diferentes niveles de gobierno, que la tarea fundamental es buscar, desde nuestra trinchera laboral, el beneficio a la comunidad, luego entonces tuviéramos un estado y sus municipios de primera; municipios y estado donde lo fundamental fuera servir al ciudadano común, gracias a eso tendríamos menos inseguridad y más desarrollo humano, es por ello que la demanda ciudadana de existir buenos gobiernos disminuiría; no más reclamos por la mala calidad en la infraestructura urbana, no más reclamos por recibir educación de mala calidad o que decir de la salud y seguridad pública, no más reclamos para disponer de vivienda digna, no mas reclamos por preservar el medio ambiente y disponer de agua potable entubada, no mas reclamos de empleos bien remunerados, no más reclamos por la pésima atención de funcionarios a la ciudadanía por trámites engorrosos, tortuosos y con resultados negativos, no más reclamos de que la ley no sea pronta, expedita e imparcial.
Para lograr que no existan reclamos convertidos en demandas ciudadanas, primero se debe elegir razonadamente quién debe ser nuestra autoridad en los diferentes niveles de gobierno, debemos pugnar porque las ofertas de campaña no se conviertan en acciones de gobierno incumplidas, la ciudadanía se debe organizar para exigir a lo que legítimamente tienen derecho, en la medida en que las demandas ciudadanas sean cada vez menos, podemos asegurar que tenemos gobiernos integrados por personas eficaces, eficientes y con visión clara de lo que representa ser funcionario.
Debemos lograr que cada día la demanda ciudadana sea menor, esto se logrará con una ciudadanía organizada, actuante y participativa en las tareas gubernamentales, solo así se obligará a los gobiernos a cumplir como verdaderos mandatarios del poder público, de otra manera, seguiremos escuchando todos los días promesas de campaña convertidas en incumplimientos de gobierno, y consecuentemente una ciudadanía demandante desde el anonimato. ¡Exijamos más, pero elijamos con alta responsabilidad!.
Debemos tener fe en que algún día cambiará la forma de gobernar; pero dependerá en gran medida de la determinación ciudadana por exigir, organizadamente, a lo que se tiene derecho, actuemos y veremos que lo más que puede suceder es que si la demanda es legítima y legal, la respuesta será favorable. ¿Usted qué Opina?
alfredotress04@yahoo.com
